Durante la última semana del pasado mes de Abril varios alumnos y profesores de nuestra sección española en el Vetési Albert Gimnázium tuvieron la oportunidad de participar en el XXII Festival Internacional de teatro escolar en español que se celebró en Bucarest. A continuación las profesoras Beatriz Requejo y Maria Elena Szilágyi nos explican cómo fue dicha experiencia.
XXII FESTIVAL INTERNACIONAL DE TEATRO ESCOLAR EN ESPAÑOL (escrito por Beatriz Requejo)
"Del
23 al 27 de abril tuvo lugar el XXII Festival Internacional de Teatro
Escolar en Español, en Bucarest (Rumanía). A dicho encuentro
asistió un grupo formado por 8 alumnos del G. Vetési Albert con la
obra adaptada del asturiano Guillermo Álvarez Un caso de robo
(título original: Un caso de robo con agresión).
En
la fotografía, parte superior y de izquierda a derecha: Eszter
Faa, Péter
Wrhovina, Ágnes
Fábián, Marci
Modori, Vanessza
Szabó, Dániel
Szelényi, Rebeka Mentes y Dániel
Faragó.
Parte
posterior: Alumnos de Pécs repartiendo flores a nuestros alumnos
tras la actuación.
En
este encuentro participaron 2 institutos por cada uno de los
siguientes países:
Hungría
(G. Vetési Albert y G. Kodály Zoltán de Pécs), Bulgaria,
Eslovaquia, Polonia, República Checa, Rumanía y Rusia. Siendo en
total 14 obras representadas en el Palacio de los Niños de Bucarest.
La
inauguración se llevó a cabo en el Teatro Odeón, una joya
arquitectónica del siglo XX. Tuvimos el honor de escuchar las
palabras del Excmo. Sr. Embajador de España en Rumanía (Ramiro
Fernández Bachiller) y al Señor Agregado de Educación en Rumanía
(Vicente López), además de otras personalidades políticas. Una vez
terminada la presentación del Festival con bailes y diferentes
actuaciones con temática española, todos los grupos fuimos al
Palacio de los Niños donde se representaron las tres primeras obras.
Cada
día, se estrenaron un total de 6 obras (mañana y tarde). Únicamente
el sábado no hubo representaciones ya que la organización llevó a
todos los institutos de excursión a Sinaia y al famoso Castillo de
Bran.
Al día siguiente (antes de nuestro estreno) hicimos un
recorrido por Bucarest y visitamos el Parlamento.
A
título personal, el objetivo marcado por la organización se llevó
a cabo satisfactoriamente, ya que los alumnos tuvieron la oportunidad
de potenciar su interés por la cultura española (con las
representaciones de diferente índole, ya sea literaria, económica,
etc.), la cultura y la civilización, además de poner en práctica
sus conocimientos de nuestra lengua ya que el español ha sido la vía
de comunicación principal entre los asistentes.
Ha
sido un encuentro cultural, lúdico y amistoso entre el alumnado y
profesorado. Finalmente, quiero agradecer a mis ocho alumnos su
dedicación, esfuerzo (durante todo el curso), comportamiento y
comprensión ante una obra que quizá para ellos se ha salido de los
acostumbrado, pero desde aquí aprovecho para publicar los diferentes
comentarios positivos por parte de algunos profesores y del Señor
Agregado en cuanto a la puesta en escena, representación de cada
alumno y su buena dicción en español.
Por
último, quiero agradecer a la Agregaduría su buena organización y
felicitar a todos los países por sus obras. Realmente he tenido la
ocasión de ver obras «casi» profesionales.
Gracias
chicos, «nos vemos en las aulas»."
Abril
de 2015: Participación en el XXII Festival Internacional de Teatro
Escolar en Español (escrito por Maria Elena Szilágyi)
La última semana
de abril nuestro instituto tuvo la oportunidad de participar en un
festival internacional de teatro en español. A este festival
asistieron alumnos y profesores de las secciones bilingües de
Bulgaria (Varna, Sofía), Eslovaquia (Žilina, Košice), Hungría
(Veszprém, Pécs) Polonia (Katowice, Szczecin), República Checa
(Praga, Ostrava), Rumania (Oradea, Ploieşti) y Rusia (Moscú, San
Petersburgo).
Llegamos bastante
cansados a Bucarest, después de un largo viaje en autobús de unas
16 horas. Nos recibieron con mucha amabilidad, con café turco
(bastante fuerte para quien no está acostumbrado) y un tipo de
galleta o bollo local, similar al pretzel, llamado Covrig.
Después de esta cálida bienvenida esperamos a las profesoras
monitoras y a las familias correspondientes a que recogieran a los
alumnos y los llevasen a sus respectivos alojamientos. A los
profesores les tocó llegar por cuenta propia en metro o en taxi al
hotel. Como no conocíamos la ciudad todavía optamos por el taxi, lo
cual resultó toda una experiencia, ya que pudimos escuchar algo de
música local (a todo volumen) mientras avanzábamos a toda
velocidad, en medio de un tráfico increíble.
Al día siguiente
fue la inauguración en el Teatro Odeon, un precioso edificio situado
en el centro de Bucarest. A continuación, tuvo lugar el cóctel de
bienvenida en el hall del teatro. Por la tarde nos dirigimos al
Palatul Naţional al
Copiilor (“Palacio de los Niños”), en
el que presentaron las obras de teatro, los estudiantes de cada país.
Ese día vimos las primeras tres obras, a cargo de los grupos de
Ploieşti, Žilina y Katowice. Las tres obras nos impresionaron,
sobretodo por la calidad del vestuario y de los efectos especiales.
El día posterior, viernes, fue muy intenso. Ese día vimos 6 obras,
tres por la mañana, y tres por la tarde, todas muy buenas, grandes
trabajos, con todavía mejores efectos que los del día anterior.
El sábado fue un
día diferente. Emprendimos el viaje nuevamente hacia Transilvania.
Viajamos en total unas 5 horas de ida y de vuelta. Pero valió la
pena, porque visitamos lugares realmente hermosos. Vimos dos
castillos, uno en la localidad de Sinaia, el castillo de “Peles y
Pelisor”, el otro fue el famoso castillo de Bran, más conocido
como castillo “de Drácula”.
La mañana del domingo también transcurrió de una forma muy agradable. Visitamos
algunos de los lugares más emblemáticos de Bucarest. El primero fue
el “Muzeul Satului”, que en realidad es un museo etnográfico al
aire libre, muy similar al Skanzen
que está cerca de Szentendre, en Hungría. Luego entramos al Palacio
del Parlamento de Bucarest. Tuvimos que esperar mucho en la fila
porque no pudimos llegar a la hora prevista. A pesar de este pequeño
percance, la visita valió la pena. No todos los días tenemos la
oportunidad de entrar a un edificio de esta magnitud.
El domingo por la
tarde fue el estreno de nuestra obra “Un caso de robo”. Fue
emocionante ver el entusiasmo y la seriedad que pusieron nuestros
alumnos, tanto en los momentos anteriores de preparación, como
durante la obra.
Fue muy gratificante, y sin duda una experiencia muy
positiva para todos. Esa noche naturalmente había que celebrarlo
como correspondía, por eso el día terminó bastante tarde, pero con
alegría, que es lo importante.
El último día por
la mañana vimos las últimas dos obras y después tuvo lugar la
ceremonia de clausura, que estuvo muy bien. Por la tarde, antes de
nuestro viaje de regreso, tuvimos algo de tiempo libre en el centro,
para hacer las últimas compras. Los últimos momentos se vieron
plenos de sentimientos ambiguos: por un lado, creo que todos nos
habríamos quedado un día más, ya que recién comenzábamos a
conocer mejor a los demás participantes y a la ciudad misma. Por
otra parte, también estábamos un poco cansados (habían sido días
muy intensos) y con muchas ganas de volver y de compartir las
experiencias vividas durante nuestra estancia.
Maria Elena Szilágyi
Al día siguiente (antes de nuestro estreno) hicimos un recorrido por Bucarest y visitamos el Parlamento.
Fue muy gratificante, y sin duda una experiencia muy positiva para todos. Esa noche naturalmente había que celebrarlo como correspondía, por eso el día terminó bastante tarde, pero con alegría, que es lo importante.
No hay comentarios:
Publicar un comentario